Desde el partido político hacen un llamamiento a las instituciones “para que cumplan con su obligación y cesen en la eliminación sistemática de estos espacios” y también al conjunto de la población para que no permita que en sus municipios se eliminen más boleras
Cantabristas ha lanzado una campaña denominada “Ni un corru menos” que tiene como objetivo defender el conjunto de boleras o corros que existen actualmente en Cantabria ante lo que consideran “una dinámica generalizada en muchos municipios de degradación y posterior destrucción de las boleras, fruto de una enorme falta de sensibilidad de las instituciones con nuestro patrimonio y nuestro deporte autóctono”. La iniciativa surge a raíz de la denuncia pública que, el pasado lunes, la formación política realizó a consecuencia de la eliminación de la bolera de Villabáñez, en Castañeda.
Desde Cantabristas anuncian que se pondrán en contacto con todos los ayuntamientos de Cantabria para pedirles que suscriban un compromiso “por escrito” de respetar de ahora en adelante “todas y cada una de las boleras que siguen existiendo en su municipio”, así como de “mantenerlas en condiciones dignas y fomentar la práctica de este deporte”. Lo que buscan, explican, “es invitar a las instituciones a recapacitar sobre la importancia de las boleras a nivel histórico, simbólico y deportivo, como espacios de socialización y de comunidad que no pueden dejarse desaparecer” y, al mismo tiempo, “lograr compromisos firmes de las instituciones para que imágenes como la de Villabáñez, de una bolera sepultada bajo el hormigón, no vuelvan a repetirse”.
Además, la formación cantabrista se pondrá en contacto con la Consejería de Universidades, Igualdad, Cultura y Deporte, para “buscar compromisos para establecer un marco normativo que impida la arbitrariedad de las instituciones públicas y la destrucción del patrimonio”, y señalan que, a este respecto, “para algo tendrá que valer” que el juego de los bolos fuera declarado Bien de Interés Cultural en el año 2015. Por otra parte, desde Cantabristas hacen un llamamiento al conjunto de la sociedad cántabra para que “no permita que en sus municipios se eliminen más boleras”, así como para reclamar el correcto mantenimiento de estas instalaciones deportivas patrimonales. A propósito de esto, han señalado que, en esta cuestión, “la Administración está jugando un papel perverso: no promueven la práctica de este deporte y no lo promocionan entre la juventud, y después eliminan boleras con la excusa de que no se juega”.