El partido considera que la nueva etapa de esta crisis sanitaria “debe gestionarse de forma descentralizada, atendiendo a las particularidades de cada Comunidad Autónoma”
Cantabristas plantea la devolución de competencias para gestionar la desescalada según los diferentes contextos autonómicos. La nueva etapa de esta crisis sanitaria “debe gestionarse de forma descentralizada, atendiendo a las particularidades de cada Comunidad Autónoma”, han afirmado. En su opinión, Cantabria debería reunir cuanto antes un órgano de gestión compuesto no solo por cargos políticos, sino también por especialistas en epidemiología y representantes de la sociedad civil.
Según el partido soberanista, la desescalada “no puede estar organizada exclusivamente en torno a las necesidades de las grandes urbes, siendo imprescindible en nuestra tierra prestar atención al mundo rural y las estadísticas sobre su afección vírica”. Cantabristas considera imprescindible poner el foco de atención en las características territoriales y a la evolución del COVID-19 en ellas para poder hacer un seguimiento más eficiente, justo y equitativo de la crisis sanitaria y las medidas de confinamiento. Para ello, considera que el Gobierno Estatal debe devolver las competencias a las Comunidades Autónomas.
Así mismo, Cantabristas ha reconocido las graves dificultades económicas a las que Cantabria se enfrenta y cómo el proceso de recuperación no va a producirse al mismo ritmo que en otras Comunidades con mayor diversificación económica. “Esta crisis ha evidenciado el error garrafal que supone perpetuar el modelo de desarrollo basado en las políticas del hormigón y la dependencia del turismo, compartido e impulsado por los principales partidos políticos cántabros durante muchas décadas ya”. Para la formación cantabrista, “es una oportunidad excelente para replantearse muchas cuestiones y comenzar a dar pasos hacia la construcción de una Cantabria con futuro, en la que cualquier persona pueda planificar una vida estable y digna”.