El partido considera que es un proyecto que profundiza en un modelo de ocio necesariamente ligado al consumo y “pone aún más en peligro al pequeño comercio y a los productores”
Cantabristas considera que un nuevo centro comercial repercutirá negativamente en la economía de la mayoría de la población de Cantabria, al poner en peligro al pequeño comercio y a los productores. “Desde Cantabristas apostamos firmemente por la soberanía alimentaria, por la gestión directa de nuestros propios recursos y nuestras políticas agrarias y alimentarias. Apostamos por el desarrollo sostenible e igualitario, no por el enriquecimiento de las grandes marcas y de los grandes promotores extranjeros”, han manifestado. En ese sentido, han dejado claro que “no toda la nueva actividad económica es positiva, si supone un perjuicio para actividades económicas ya existentes” y, en ese sentido, ha alertado de que es un hecho probado que la apertura de grandes centros comerciales “puede repercutir negativamente a medio y largo plazo”.
Desde la formación han mostrado su desacuerdo con la implantación de un nuevo centro comercial debido a que profundiza en uno de los grandes problemas que, en su opinión, tiene Cantabria: las alternativas de ocio saludable y más allá del consumo. Consideran que este tipo de espacios “contribuyen a un modelo económico insostenible a largo plazo”. El partido ve, además, un peligro potencial en este proyecto “ante los problemas relacionados con la adicción a las casas de apuestas y a otros elementos que ocupan el tiempo libre de los más jóvenes de forma perniciosa”.
Los soberanistas han aprovechado también para explicar que caminar hacia un modelo de desarrollo diferente, hacia políticas soberanistas que apoyen el producto local y su implementación en un mercado de proximidad, son sus objetivos: “Nunca vamos a estar del lado de los que únicamente buscan el enriquecimiento de los que ya son ricos. En Cantabristas nos debemos a la mayoría social, a las personas trabajadoras y a las que trabajan nuestra tierra”.