Aire nuevo
Cantabria necesita aire nuevo. Lo necesita la política autonómica y lo necesitan las instituciones de autogobierno. Aire nuevo para avanzar en otra dirección, para remar a la contra del modelo que nos ha traído hasta aquí. Aire nuevo para decir y hacer las cosas de otra manera, para poner las propuestas en el centro del debate y abandonar la inercia de las políticas de siempre. Para dejar a un lado el conformismo y la sensación de que no es posible cambiar las cosas.
Cantabristas presenta su candidatura al Parlamento de Cantabria con el mismo objetivo con el que trabajamos desde que empezamos a caminar como fuerza política: defender nuestra tierra y los intereses, derechos y necesidades de nuestra gente. Un trabajo que, a lo largo de este tiempo, hemos desarrollado a nuestra manera, huyendo de los partidismos y la improvisación y planteando propuestas sólidas, rigurosas y que responden a necesidades reales de la sociedad cántabra.
Los documentos que hemos presentado durante esta legislatura, como el Modelo Cántabro de Transportes, el Plan Cuidar Cantabria para avanzar hacia un modelo turístico de futuro y sostenible, la propuesta de creación de un Instituto Cántabro de Cultura y Patrimonio o la propuesta para la delimitación comarcal de Cantabria, recogen gran parte de los pilares fundamentales sobre los que se asienta nuestro proyecto político.
El programa que ahora presentamos, además de reflejar con claridad nuestra forma de hacer las cosas, haciendo política a partir de propuestas y ofreciendo una alternativa a la sociedad cántabra, plasma en 500 medidas la que consideramos que debe ser la hoja de ruta para avanzar hacia otro modelo para Cantabria.
El modelo que propone Cantabristas tiene como horizonte la consecución de una sociedad más justa y sostenible, basada en la solidaridad, la democracia, la inclusión, la justicia social, los servicios públicos, la igualdad, el respeto por el medio ambiente y la defensa de nuestra cultura y patrimonio.
Para alcanzar estos objetivos, planteamos una apuesta firme por un nuevo modelo de desarrollo, que mire más allá de las políticas del hormigón y del ladrillo. Un modelo que se desarrolle pensando y planificando a largo plazo y garantizando la sostenibilidad de todas aquellas cosas que son motivo de orgullo para todas las personas que habitamos Cantabria.
A lo largo del programa, establecemos las medidas necesarias para poner en marcha un nuevo modelo productivo basado en la producción local, el I+D+i, la educación, la sostenibilidad y la redistribución de la riqueza. Un modelo apoyado en una fiscalidad más justa, en la apuesta por sectores productivos estratégicos y en la puesta en marcha de una Banca Pública Cántabra.
Para lograr el cambio que necesita Cantabria, planteamos medidas para avanzar hacia unos servicios públicos de calidad, donde la educación pública sea el motor del nuevo modelo productivo y la sanidad pública un derecho universal y un pilar fundamental del bienestar y la igualdad social. Apostamos por la inclusión social a través de una transformación y mejora de los servicios sociales, la inversión en atención a la dependencia y el reforzamiento de los mecanismos de garantía de ingresos.
Un programa que está atravesado por un compromiso firme con el feminismo y la igualdad, así como con los derechos de las personas LGTBI. Queremos construir una Cantabria que avance hacia el respeto a la diversidad, reivindicándola como un aspecto necesario y positivo para nuestra sociedad.
Proponemos avanzar hacia un modelo económico y social que garantice el bienestar para todas las generaciones. Para lograr este objetivo, necesitamos un modelo que proteja nuestro entorno natural de manera efectiva, con un Plan de Ordenación del Territorio que establezca un uso racional del suelo y proteja de forma efectiva el suelo fértil y la riqueza medioambiental de Cantabria. En esa línea, promovemos planes destinados a la mejora y conservación del medio ambiente, con la sustitución gradual de las plantaciones forestales de crecimiento rápido y la eliminación de las especies invasoras. Desde Cantabristas trabajamos en la superación de las políticas del corto plazo y de la búsqueda del beneficio a cualquier precio, para poder poner el medio ambiente en el centro de la acción política.
Nuestra cultura es el reflejo de lo que somos como pueblo, de nuestro presente y nuestro pasado, y debe ser una de las claves para construir el futuro de Cantabria. Queremos una tierra que se valore y reconozca a sí misma, orgullosa de sus raíces, de su cultura y sus tradiciones. Apostamos por promover la cultura cántabra en todas sus manifestaciones, así como nuestro patrimonio material e inmaterial.
En definitiva, defendemos una Cantabria donde todas las personas puedan vivir y trabajar con dignidad, donde la política piense en las próximas generaciones y donde nadie se vea obligado a emigrar. Creemos que Cantabria tiene condiciones para caminar hacia un modelo económico y social que garantice el bienestar para todas las personas, para ser mucho más de lo que es hoy. Necesitamos cambiar de modelo y hacer realidad una alternativa para hacerlo posible.
Es el momento de avanzar en el autogobierno, de garantizar los derechos sociales y la igualdad para todas las personas. Este cambio debe ser impulsado desde Cantabria, pensado desde aquí, poniendo en el centro nuestras necesidades y objetivos como pueblo y como personas. Así lo hacemos como fuerza política, trabajando desde y para Cantabria, porque en Cantabristas creemos en la fuerza de nuestra tierra, en la capacidad de decidir y afrontar las dificultades, de transformar la sociedad para avanzar hacia la justicia social y la igualdad.
Tenemos la oportunidad de avanzar hacia una nueva Cantabria de oportunidades, de modernidad, de tradición, de compromiso por el bien común, de igualdad, de derechos, de cultura, de servicios públicos, de espacios naturales, de pueblos vivos y ciudades acogedoras y habitables. Una Cantabria con futuro y con fuerza y compromiso para defender todo aquello que la hace única.
Esa es la fuerza del cantabrismo, la fuerza de la gente que ama y defiende su tierra, que no se resigna. La fuerza de todas las personas que con su trabajo y su compromiso han mantenido viva, a lo largo de la historia, la llama de nuestro pueblo. La fuerza de quienes lucharon por las libertades y los derechos humanos. La fuerza de la gente trabajadora y humilde, de nuestros pueblos y nuestros barrios. La fuerza de lo que somos.
La misma fuerza que hace posible la alternativa que presentamos y desarrollamos en este programa y que esperamos que, con el apoyo de la sociedad cántabra, pueda convertirse en una realidad en los próximos años. Aire nuevo.
Un proyecto para hacerlo posible
El proyecto político de Cantabristas, articulado en este programa a través de 500 propuestas, tiene como objetivo avanzar hacia una transformación política, económica y social de Cantabria, dando pasos hacia un modelo económico de futuro y verdaderamente sostenible, profundizando en el autogobierno, blindando los servicios públicos, defendiendo los derechos sociales y la igualdad, protegiendo nuestro medio ambiente y nuestros paisajes y apostando por la revitalización de la cultura y el patrimonio de Cantabria.
Una nueva Cantabria, orgullosa de sus raíces y profundamente comprometida con el objetivo de construir un futuro mejor. Un proyecto para hacerlo posible, con la fuerza de nuestra tierra y de nuestra gente. Eso es Cantabristas, aire nuevo.